El aparato digestivo supone la mayor interfaz entre nuestro organismo y el exterior. Lo que bebemos, comemos y el modo en el que lo procesamos tiene un impacto directo en nuestra salud y bienestar. Su longitud aproximada es de 7 a 10 metros y su superficie de alrededor de 100 m2.
La principal función del aparato digestivo es la captación de nutrientes pero también actúa como barrera defensiva, tiene un gran protagonismo inmunitario e influencia sobre el sistema nervioso.
En esta entrada hablaremos de dos conceptos muy importantes en PNI, la hipoclorhidria y el complejo migratorio motor.
Hipoclorhidria. El pH del estómago es muy ácido, entre 2 y 3 y dependemos de ese pH ácido para eliminar los microbios que puedan contener los alimentos y para hacer una correcta digestión. La pérdida de acidez por déficit en la producción de ácido hipoclorhídrico en el estómago se conoce como hipoclorhidria y es causa de numerosos problemas digestivos. Es necesario que exista un gradiente de pH entre el esófago y estómago para que el esfínter esofágico inferior sea competente, la hipoclorhidria puede ser uno de los factores involucrados en el reflujo gastroesofágico por incompetencia del esfínter. Los signos más comunes de hipoclorhidria son uñas débiles por falta de absorción de minerales, dilatación de capilares en pómulos y nariz por exceso de liberación de histamina, disbiosis intestinal porque se pierde la función antiséptica del ácido clorhídrico, distensión abdominal, eructos, anemia por falta de absorción de hierro. Entre las causas de hipoclorhidria se encuentran el estrés, comer demasiadas veces al día sin dejar períodos de descanso al aparato digestivo y la ausencia de proteína en la dieta.
Complejo migratorio motor. Se trata de un patrón específico de contracciones musculares en el tracto gastrointestinal, estas contracciones son responsables de mover el contenido alimenticio a lo largo del tracto digestivo arrastrando los restos de comida que quedan en el intestino y realizando una limpieza del mismo. Una fase completa de limpieza dura 4 horas y cada vez que se realiza una ingesta se frena el complejo migratorio motor. Si nunca dejamos 4 horas entre ingestas porque estamos comiendo a todas horas, impediremos la función del complejo migratorio motor aumentando la fermentación y el riesgo de sufrir un sobrecrecimiento bacteriano. La masticación inicia el proceso digestivo, por ejemplo, masticar chicle constantemente supone una activación-inhibición del proceso digestivo que lleva a un exceso de fermentación y distensión abdominal. En ocasiones la afectación del complejo migratorio motor es debida a una respuesta inmunitaria tras una infección intestinal bacteriana. Así vemos a pacientes que, tras una gastroenteritis, desarrollan un SIBO (síndrome de sobrecrecimineto bacteriano) debido a esta respuesta inmunitaria posterior. En estos casos recuperar la flexibilidad metabólica y espaciar comidas serán fundamentales en el tratamiento.
Por tanto, la salud del aparato digestivo es central en PNI, la historia clínica detallada es fundamental para conocer su origen.
Los tratamientos en PNI están orientados a acidificar el estómago, regenerar mucosas, hacer una dieta evolutiva, controlar el estrés y espaciar comidas.